El mundo cristiano hace no mucho (lamentablemente) reparo en el potencial del cine y la cultura pop para expandir su mensaje, sin embargo, como todo novato tendía a tener errores esperables por la falta de oficio: tomas innecesarias, poca profundidad en los personajes, finales predecibles o muy llanos. Eso no pasa en este caso.
El caso de Cristo se basa en el libro homónimo de Lee Strobel, pero cuenta la historia detrás de la historia, en la cual un periodista ateo, mordaz e implacable en la búsqueda de la verdad basada en los duros hechos, se instala en el Chicago de los años 70, al tomar este nuevo trabajo tiene una experiencia donde su vida cambia de rumbo, su esposa comienza a asistir a una iglesia (seamos honestos, no cualquiera, en este caso es Willow Creek con un joven Byll Hybells), lo cual le indigna y le motiva a hacer lo que mejor sabe hacer, investigar con rigurosidad para probarle a su mujer y al mundo que la resurrección de Jesús, piedra angular de la fe, es solo una mera farsa.
No podemos dar mas información para no caer en hacer spoiler, pero se agradece una historia en formato de biografía, con buena cadencia, y una atención obsesiva al detalle: el color de las escenas, los vehículos (ojo con el hermoso camaro rojo), la decoración, realmente parece sacada de una película de Charles Bronson, navega bien en aguas difíciles donde otros han naufragado.
Esta película es mas que recomendable para trabajar con universitarios, profesionales o académicos, agnósticos y cualquiera que este dispuesto a acompañar al personaje central en su búsqueda angustiosa por esclarecer los hechos...y de paso la existencia.
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